¿Y si dejamos de esperar la vida?

No sé si a muchos les sucedió como a mí.

Desde pequeña siempre creí que yo era especial. Algo maravilloso y fuera de lo común iba a sucederme. Al principio pensé que sería descubierta antes de mis 20´s. Cuando llegué a esa edad, mi vida seguía siendo la misma. Luego estudié periodismo y pensé en mi exitosa carrera y que mi gran talento seria una revelación para alguien. ¡No sucedió!

He paso mucho tiempo sin saber cual es mi don. Mi familia es una carta de talentos variopintos en el que ya sean las artes, la cocina o la ciencia, todos tienen una especialidad. Mientras tanto yo iba por el mundo iniciando proyectos sin terminar. Sintiendo que siempre me faltaba algo.

Lo que se convirtió en mi gran revelación fue entender que soy especial y siempre lo he sido. No necesitaba que nadie me descubriera, sino que yo misma llegara a ese descubrimiento propio. No necesito esperar nada, ¡por que la vida está siendo en este instante!

Puede parecer una conclusión básica y conformista, pero entenderlo e interiorizarlo, ha hecho que generara en mi una aceptación y una confianza en mi misma que antes no tenía.

¿Cuántos han llegado a sentirse perdidos, o que lo que realizan no es lo que de verdad quisieran estar haciendo? ¿Cuántos no tenían sueños increíbles de pequeños de cómo iba a ser su vida cuando grandes que lamentablemente no se han cumplido?

La mayoría del tiempo estamos esperando que sean factores externos los que determinen un rumbo u otro en nuestra vida. Sabemos que tenemos el potencial, pero aun así no nos atrevemos a ir por lo que es nuestro. El miedo nos paraliza.

Quizás ya es hora de dejar que el universo nos de todo lo que nos merecemos y nos inunde de todo su infinito.

Dejemos de esperar. Entendamos que el éxito tiene muchas formas y maneras en las que podemos alcanzarlo. Nuestro camino es único y nadie más es el creador de la obra maestra de nuestra propia vida.